Dolor de rodilla: Lesión de la grasa de Hoffa
La enfermedad de Hoffa es una patología que afecta a la cara anterior de la rodilla. Se conoce como síndrome de Hoffa-Kastert o síndrome de la almohadilla grasa infrarotuliana.

El paquete adiposo de Hoffa se localizada por detrás del tendón rotuliano y zona inferior de la rótula. Puede proliferar de forma anormal, se hipertrofia y genera alteraciones inflamatorias asociadas, provocando un pinzamiento de esta zona.
Se trata de una enfermedad poco habitual pero que incapacita a la persona que lo sufre para que pueda hacer una vida normal. Es más frecuente en personas jóvenes y predomina en mujeres.
La grasa de Hoffa es una estructura intracapsular, que ocupa el espacio extrasinovial y que actúa como un cojín flexible dentro de la articulación de la rodilla, con un papel importante en el manejo de las compresiones en la articulación.
Tiene un efecto mecánico y protector, y amortigua las estructuras anatómicas de la zona. Es muy susceptible a generar dolor en la región anterior, dada su directa relación con varias estructuras y su alto contenido en terminaciones nerviosas.
El tratamiento recomendado es generalmente conservador y consiste en reposo, antiinflamatorios tópicos u orales y fisioterapia.
La enfermedad de Hoffa la han sufrido deportistas famosos como Rafael Nadal en su rodilla, y que le ha obligado a perderse los Juegos Olímpicos, se puede “curar al 100%”. Produce un dolor en la parte anterior de la rodilla y pérdida de movilidad en la actividad deportiva. No es una enfermedad incurable, al contrario, se puede recuperar al 100%. El tiempo de recuperación depende de muchas cosas, como la intensidad de la inflamación o las lesiones anteriores de rodilla, así como el compromiso del paciente.
El diagnóstico de la enfermedad de Hoffa es difícil porque los síntomas no son muy específicos y se pueden encontrar en muchas otras patologías. La radiografía de la rodilla a menudo es normal y una RMN no siempre aporta la confirmación del diagnóstico. De todas formas, sí que puede verse en otros muchos casos como en esta radiografía o en esta resonancia.
Etiología
Pueden ser muchas las causas que alteren la composición de la grasa, generando dolor. Se clasifican en:
Causas intrínsecas
Condroma intracapsular
Sinovitis nodular focal
Fibrosis post artroscopia o cirugía
Lesiones en cizalla como en lesiones de LCA
Enfermedad de Hoffa o Síndrome de la Gras de Hoffa
Causas extrínsecas
Trastornos articulares: Derrame articular y cuerpos intrarticulares, quiste meniscal, ganglión y lesión del cíclope.
Trastornos sinoviales: Sinovitis villonodular pigmentada, condromatosis sinovial, artritis reumática y la sinovitis asociada a la osteoartritis.
Trastornos extracapsulares: Fractura de la rótula, rotura del tendón rotuliano, enfermedad de Sinding-Larsen-Johansson, bursitis infrapatelar superficial y la enfermedad de Osgood-Schlatter.
Clínica y exploración física
Los síntomas que se presentan son:
Dolor en cara anterior de la rodilla que aumenta con el movimiento, extensión forzada y durante la bipedestación prolongada
Edema a ambos lados de la rótula y en zona proximal al tendón rotuliano.
Sensación de bloqueo al subir y bajar escaleras
Crepitación en la zona dolorosa
Limitación de la movilidad, incapacidad para realizar la extensión completa
Sensación de inestabilidad

Diagnóstico
El estudio radiológico suele ser normal en las fases iniciales. En fases crónicas, puede visualizarse una calcificación.
En la RM se pueden apreciar alteraciones inflamatorias, signos de edema e hiperintensidad en la serie T2. Nos suele aportar la confirmación diagnóstica.

Antes de solicitar pruebas complementarias, se debe hacer un buen diagnóstico diferencial con el resto de posibles causas susceptibles de generar dolor en la cara anterior de la rodilla.
Tratamiento
En situaciones en las que las fuerzas están dirigidas a la rótula, esta grasa actúa como un amortiguador de choque, protegiendo así las estructuras. En el caso de un fuerte impacto directo la rótula, la almohadilla de grasa puede llegar a ser pinzada entre el cóndilo femoral y la rótula. Como la almohadilla de grasa es una de las estructuras más sensibles en la rodilla, esta lesión es conocida por ser extremadamente dolorosa.
Este estado es normalmente de larga duración, agravado por la extensión (enderezamiento) de la articulación de la rodilla. De ahí que la almohadilla de grasa esté bajo constante irritación y que pueda llegar a estar muy inflamada.
Reposo relativo (evitar hiperextensión de rodilla, arrodillarse e impactos)
Aplicación local de hielo
Aines y analgésico
Fisioterapia
El tratamiento puede durar 4 o 5 meses y si no se obtiene resultado se recurre a infiltraciones o a cirugía.
Si no resulta efectiva la fisioterapia se puede realizar infiltración con corticoides. En caso de evolución desfavorable, se propone la cirugía artroscópica, que puede mostrar la inflamación y proliferación del tejido adiposo.